En los próximos días finaliza el año que nunca hubiéramos imaginado vivir. La pandemia por el covid 19 ─que aún no terminó─ puso al mundo patas para arriba y nos obligó a aislarnos, cambiar nuestras costumbres y repensarnos como sociedad. También nos enfrentó a irreparables pérdidas, tanto individuales como colectivas. Entre tanta incertidumbre y dolor, sin embargo, nos acompañó la certeza de contar con un Estado presente, que se puso al hombro la tarea más difícil: salvar todas las vidas posibles y, al mismo tiempo, aplicar políticas públicas para que no se derrumbara la economía, que venía muy deteriorada por los últimos cuatro años de neoliberalismo salvaje.
En materia cultural, el Ministerio de Cultura de la Nación respaldó a espacios y a artistas a través de distintas convocatorias, subsidios y créditos. Por nuestra parte, desde la Casa Nacional del Bicentenario intentamos acompañar a nuestros públicos a la distancia a través de películas, charlas, entrevistas, actividades lúdicas, exposiciones virtuales, playlist musicales, el concurso SOMOS y la radio CASo (del Centro de Arte Sonoro). Y desde hace algunas semanas, también estamos disponibles para recibirlxs personalmente, con todos los cuidados necesarios.
Les agradecemos a todxs lxs que han estado del otro lado, leyendo, mirando e interactuando con la CNB a través de las pantallas, y a quienes ya volvieron a acercarse de forma presencial, y les deseamos que tengan un buen cierre para este año tan complicado. Se viene un 2021 con muchos proyectos y tenemos la convicción de que, como dijo el Flaco Spinetta, "mañana es mejor".
María Fukelman
Directora de la Casa Nacional del Bicentenario